Capítulo 18


Cap.18

La espera se hizo eterna hasta que unos pasos se acercaran a su cuarto. Durante un rato la persona que estaba al otro lado de la puerta no entró de inmediato, parecía que necesitara reflexionar.
Un minuto más tarde unos pequeños golpes en la puerta dieron paso a quien estaba tras ella, Raúl.

-Hola- dijo el cabizbajo- ¿puedo pasar?

-Hola, claro pasa.

Él entro despacio y se sentó en la ventana junto a ella. Estuvieron un rato en silencio, Raúl tenía la mirada distante, miraba el suelo, el techo… Pero no la miraba a ella. De repente, hablo:

-Siento lo que te he dicho en el hospital, es que… mi padre está muy mal y le tienen que operar del corazón y lo pague contigo… perdóname- empezó a sollozar- no quiero perderte, quiero que sigas conmigo…

-Llora todo lo que quieras, luego me dirás lo que quieras- aquellas palabras hicieron que las lagrimas de Raúl se derramaran por sus mejillas pero no se movió de donde estaba, lloraba en silencio.

Tara se sentó junto a él y le dio un abrazo para que él ocultara la cara en su hombro. Escuchaba como se desahogaba en su hombro haciendo pequeños sonidos. Lo aparto un poco y le trajo pañuelos para que se pudiera secar. Durante ese largo rato Tara le hablo de cosas para animarlo, para recordar buenos momentos…

-…¿Te acuerdas aquellas vez que subiste por esta misma ventana cuando estaba enferma para darme el medicamento?- notó como el esbozaba una pequeña sonrisa entre lagrimas.

Raúl no se calmaba entonces Tara decidió hacer algo que las chicas suelen hacer cuando están mal y deprimidas. Le dijo a Raúl que la esperara ahí y bajo al piso de abajo. Se dirigió a la cocina, al congelador y de él saco dos helados: de almendras y caramelo para ella y chocolate con pepitas para él. Subió arriba con todo y le dio a Raúl su helado, este lo tomo con ganas. Comieron en silencio, les vino muy bien y Tara se dijo a su misma que había acertado.
Unos minutos más tarde Raúl deja el bol de helado en el suelo junto al trapo que lo cubría y la cuchara. Se giro hacia ella y trago saliva:

-¿Quieres volver a intentarlo conmigo?- le pregunto a Tara justo cuando esta tenía la cuchara en la boca. Se saco la cucha y dejo su helado junto a la de él.

-Sí, claro que quiero- contestó ella y se acerco a sus labios pero sin tocarlos, no sabía si era lo correcto- ¿Puedo?

-Sí- pero antes de que ella se acercara más el le tomo la cara y le dio un largo beso- Gracias, tenía miedo que no quisieras…

Se volvió a emocionar pero en vez de llorar, le echó mano al helado de Tara y ella hizo lo mismo. Los dos tenían las cucharas llenas y él se metió la suya en la boca pero Tara no, con la cuchara le manchó las mejillas y la nariz, cosa que comenzó una guerra de helado.
La ropa, ellos, el cuarto… todo termino lleno de helado. La madre y la hermana de Tara no estaban en casa así que Raúl y Tara se dieron una ducha juntos para quitarse todo el helado.
Tras media hora bajo el agua caliente, se envolvieron en dos albornoces y de fueron al cuarto de Tara. En cuanto pisaron el cuarto, los albornoces cayeron el suelo y lo que ocurrió en ese cuarto durante una hora fue cosa de ellos dos.

La madre de Tara llamó a Tara por teléfono y le dijo que no irían para cenar, que llegarían tarde. Tara aprovechó esa llamada para preguntarle a su madre a ver si Raúl podría dormir en casa ya que su madre estaba en el hospital cuidando a su padre y él estaba solo. Su madre, para sorpresa de Tara, dijo que sí.
Raúl se fue a su casa a por el pijama y más cosillas que necesitaría y enseguida estaba en casa de Tara.
Cuando Raúl llego al cuarto de Tara otra vez, la encontró en pijama con el portátil sobre la cama y estaba escribiendo en su blog. Raúl le contó que quería hacerse una cuenta de youtube y Tara lo animó a que lo hiciera. A Raúl la encantaba todo eso del cine y a Tara también le encantan la interpretación así qué… Raúl le pidió que le ayudara en alguna ocasión a grabar y ella accedió encantada.

El resto de la noche hablaron sobre posibles vídeos e ideas, como hacerlo, con quien, que material conseguir... Y se durmieron uno junto al otro imaginando como quedarían juntos en un vídeo de youtube.